No te preocupes ni le des más importancia de la que tiene. Creo que todos, más o menos, hemos atravesado en algún momento este "camino de espinas". Decía David Bowie en una canción: "no esperes nada de nadie... así jamás te decepcionarán. Tome aquello que se te ofrezca, espontáneamente... como un regalo"
Sabes, ?... hacemos proyecciones constantemente. No siempre conscientemente. Esperamos tal cosa que sea así... y luego, viene la realidad. Y sí. Se hace duro. Cree en ti. Siempre. En tus posibilidades, en tu capacidad, como persona... y lo demás... mejor dicho, los demás, que vayan a su aire. Sin esperar nada.
No suena, para nada, raro. Es la eterna insatisfacción, el sentirse estafado por la vida. El prejuzgar que las cosas serán como temes que van a ser... Cuentas que un hombre estaba tan obsesionado de que le perseguía un dragón, que acabó siendo devorado por un dragón. De nuestras pulsiones creamos nuestros monstruos.
, tienes muchos mañanas en los que despertar. Tienes un corazón donde albergar cariño. Tienes unos brazos con los que abrazar y unos labios con los que besar. Tienes un suelo donde pisar y realizar un paso tras otro... crear tu camino... y, sobre todo, tienes la posibilidad de contemplar, sentir, la belleza que nos rodea... esa sonrisa de un niño. Esa canción que te araña el alma, esa charla que compartes un domingo por la tarde, relajado, ante un humeante té... y esa posibilidad, cada mañana, de tener todo un día por delante para vivir... para aprender.
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